Psicologa gestáltica transpersonal en Nueva Córdoba
La teoría de la sombra
Agazapada en lo más profundo del inconciente, esquivaq y elusiva la sombra acecha. Es posible que sin el conocimiento de que existe, a través de la teoría de la sombra y de la sproyecciones, nos veríamos imposibilitados de integrarla en la conciencia y nutrirnos de su energía. El trabajo de la sombra abre inmensas posibilidades para el trabajo interior y en las relaciones de convivencia.
Así, la sombra se manifiesta como el conjunto de aspectos rechazados del inconciente, la otra cara del ego. Dicho de otro modo, siendo el ego aquello que somos y conocemos de manera conciente, la sombra es la parte que no percibimos concientemente, y que de modo indirecto nos recuerda su existencia. Para mostrarse la sombra utiliza las proyecciones, los síntomas, las imágenes oníricas, los lapsus, y otras estrategias mas o menos simbólicas. Cuando los seres humanos trazamos fronteras o líneas divisorias, estableciendo lo que está bien o lo que está mal, comienzan los conflictos, y es cuando la sombra del inconciente comienza a manifestarse con los síntomas que se manifiestan. El deseo de agradar, la necesidad de aprobación, el miedo a ser rechazado, hicieron que mostrásemos nuestra parte aceptable y ocultáramos nuestra parte la parte rechazada de nosotros mismos , así la amabilidad, la corrección, primaron en nuestra conducta en desmedro de la "Otra parte", que supimos indigna.
En la psicología transpersonal, la sombra es la imágen que me muestra MI INCONCIENTE, y resumiendo, la sombra es el aspecto negado de nosotros mismos que rechazamos, entonces muchas veces la enviamos al cuerpo, a través de enfermedades, a través de la somatizaciones, o se la atribuimos a otro a través de la proyección...En la medida que integramos nuestra sombra haciéndola conciente, le echamos luz, la integramos, nos amigamos con ella al verla como parte de nosotros mismos, que no es ni buena ni mala, sino simplemente "es"... acepto la sombra, acepto lo que es, amo lo que es y me hago cargo de lo que veo en el otro, me doy cuenta que las cosas no son ni buenas ni malas, simplemente son... y así crecemos, evolucionamos, y nos damos cuenta que TODO ESTÁ EN MÍ , Y YO ESTOY EN TODO...
