Este concepto surge de la Psicología del Budismo, y tiene que ver con la amabilidad, y la amistad incondicional con nosotros mismos, en el idioma de esta religión es MAITRI, y tiene que ver con volver la mirada hacia nosotros mismos, vernos cuanto tiempo invertimos en reinventarnos, cuanto hemos hecho en nuestra vida, sacando lo mejor que tenemos para superar las vicisitudes que enfrentamos a lo largo de la vida. Muchas veces nos castigamos con la culpa, pensando o sintiendo que no hemos hecho lo suficiente para los otros, y culpándonos e inconscientemente castigándonos con actitudes de autoabandono. Nos peleamos con nosotros mismos y somos indulgentes con quienes no nos registran y nos manipulan y exigen, y con eso cuanto nos perdemos en nuestro camino, en fin no nos perdonamos. Con el afán de ser "buenas" personas, hacemos lo imposible por no dañar a otros, y llevar una vida honesta para no engañar a otros y no agredir a quienes muchas veces si se lo merecen, poniendo en marcha una cantidad de conductas autodestructivas y crueles hacia nuestra persona, Tenemos que saber que uno de los objetivos de la terapia es lograr una maravillosa relación consigo mismo, no se trata de ser auto indulgentes, se trata de comprendernos un poco y saber que en este camino de autodescubrimiento nos encontraremos con esas piedras en el camino, y creo que debemos observarla, para poder crecer con una humildad genuina, mirándonos con autocompasión, poder ver nuestros avances y reconocernos como héroes, y que, en el camino de autodescubrimiento nos vamos a encontrar con monstruos gigantes que debemos correr y a veces destruir, para poder avanzar y fluir con aceptación y perdón. Aflojar al crítico interior, es hacer aparecer al Testigo contemplativo que observa nuestras emociones, sin negarlas sino que entenderlas para trascenderlas y poder vivir así más libre de condicionamientos fluyendo con las adversidades. Mirar hacia adentro y darnos cuenta que eso sagrado inteligente y sabio estuvo allí siempre, pero ahora decidimos miralo y conectarnos cada vez más con esa esencia divina, NUESTRO SER INTERNO.La autocompasión es una habilidad que puede ser cultivada por cualquier persona, y se trata sobre todo de:
*Dejarse de tratar a sí mismo duramente tratando con las emociones dificiles con mayor facilidad.
*Motivarse a sí mismo con amabilidad en lugar de tratarse severamente.
*Transformar relaciones desafiantes, tanto las nuevas como las antiguas, practicando la autocompasión en la vida cotidiana.
Aprender de la amistad que tenemos con otros y lo que ponemos allí, para hacerlo con nosotros mismos.
Convertirnos en los mejores maestros de nosotros mismos.
Manejar "la fatiga de la empatía" ( ser empáticos todo el tiempo)
Practicar el arte de saborear la vida, la felicidad y la autoapreciación.
Aprender participando en talleres, iniciar una búsqueda tendiente a ser cada vez más autoamorosos con nosotros mismos.
El entrenamiento de estas prácticas acrecienta nuestro sentimiento de felicidad y nuestra f habilidad para hallar resoluciones sanas a nuestros vínculos másdificiles, reduciendo la ansiedad, y evitando el estrés y la depresión.
