Hubo un momento en que dejaste de creer en el amor...y luego apareció alguien que te dio vueltas.
Hubo un momento en que un amigo se negó...y apareció otro que sorprendió tu corazón a tu corazón.
Hubo un momento en el que u na pelea prometía ser eterna...Y sin darte cuenta de repente terminó en un abrazo.
Hubo un momento en que un examen parecía imposible de pasar...y hoy es una materia más que aprobaste en tu carrera.
Hubo un momento en el que sentiste que no podías hacer algo...y hoy te sorprendes haciéndolo.
Todos atravezamos estos momentos y así como hubo momentos en que la vida cambió en un instante, nunca olvides que aún habrá momentos, en que lo imposible, se volverá un sueño hecho realidad.
Por eso, te quiero invitar a celebrar todos los días porque:
-Celebrar no es sólo cumplir años, celebrar es reconocer todo lo que pudimos hacer en estos años.
-Celebrar no es solamente prender velitas, es reconocer las vidas que , en este tiempo pudimos iluminar.
-Celebrar no es sólo festejar con una buena comida, sino que hemos podido nutrir muchos corazones con nuestra sabiduría y amor.
Es sentirse amigo de todo el mundo y agradecer por haber sido elegido para realizar tareas de una manera única.
Por eso, la lluvia nos limpia y nos aclara siempre, aprender a tolerarla sabiendo que en algún momento llega la calma y nos invita a vernos y poder reconocer nuestro poder para poder cambiar los malos momentos en aprendizajes. El poder reconocido se convierte en un tiempo determinado en sabiduría.
